Es un convenio más y sin embargo es el convenio que se esperaba desde hace tiempo porque permitirá poner en marcha en zonas acotadas, de manera conjunta y con un seguimiento completo una batería de medidas que la Universidad de Extremadura (Uex) ha desarrollado en los últimos años para luchar contra la expansión de la tuberculosis bovina en la región. El DOE publicó ayer los pormenores del acuerdo entre la Junta y la Uex para desarrollar durante los próximos cuatro años un proyecto piloto para erradicar la enfermedad, con una inversión de 667.000 euros por parte de la Consejería de Medio Ambiente y la participación del grupo de investigación de Sanidad Animal de la facultad de Veterinaria, que será el encargado de coordinar los trabajos.
La clave del proyecto es que entre 2016 y 2020 se monitorizarán una serie de fincas de la región «cuya actividad única sea la caza o la ganadería» y también «fincas con actividad mixta», según se recoge en el convenio. En ellas se llevará a cabo, por un lado, un seguimiento a las especies cinegéticas de estas fincas y las acciones cinegéticas que se desarrollen para conocer el alcance de la enfermedad allí.
Junto a eso, también se pondrán en marcha medidas que, de forma aislada se llevaron a la práctica en convenios anteriores con buenos resultados: mejoras nutricionales para que los organismos de los animales sean más resistentes, mejoras sanitarias para prevenir la incidencia de otras enfermedades que pueden debilitarles frente a la tuberculosis. También se ensayará, cuando el Gobierno central «lo autorice» la vacuna frente a la tuberculosis que se está desarrollando para jabalís y ciervos, que se aplicará a los ejemplares de dos fincas públicas de la región.
