Dispositivo de seguridad vial

La producción de tomate en Extremadura se elevará a 2,2 millones de toneladas

Supondrá 1.500 desplazamientos de camiones al día entre las explotaciones agrarias y las empresas transportadoras

Tomates en un remolque tirado por un tractor.

Tomates en un remolque tirado por un tractor. / UPA-UCE

Almudena Villar Novillo

Almudena Villar Novillo

La última semana de este mes comienza la campaña de tomate en Extremadura con buenas perspectivas, ya que se espera una producción de 2.200.000 toneladas, una cantidad mucho mayor que en 2023, según apunta UPA-UCE. Esta cifra significa más de 1.500 desplazamientos por carretera diarios entre las explotaciones agrarias y las empresas transformadoras, que supondrán 100.000 al finalizar la campaña a primeros de octubre.

Por ello, desde la Delegación del Gobierno en Extremadura se ha diseñado un dispositivo de seguridad vial que, según el delegado del Gobierno, José Luis Quintana, implica un aumento de los controles a los camiones. Y el año pasado «se incrementaron un 24% y las denuncias se redujeron un 11%, aunque se aumentaron las sanciones por el exceso de la carga o al vertido de líquidos y tomates, por lo que no hay que bajar la guardia». Y, una vez más, apela a la implicación de todas las partes, aunque reconoce que «se ha avanzado mucho en los últimos años, y no se produjo ningún caso que significase la apertura de un procedimiento por delito».

Para la puesta en marcha del dispositivo, el delegado del Gobierno mantuvo ayer una reunión con las organizaciones agrarias y los transportistas, e Ignacio Huertas, secretario general de UPA-UCE, reclamó a Quintana que «no se intensifiquen las inspecciones en el transporte del tomate por carretera durante los picos de producción que se puedan dar en esta campaña, que comenzará con retraso, con el fin de no obstaculizar la recogida».

Cuatro accidentes en 2023

En este sentido, Huertas subrayó el esfuerzo económico de los agricultores para mejorar el transporte del tomate «y así seguirán haciéndolo».

De hecho, este empeño se plasma en el refuerzo de la seguridad en los últimos quince años. «El año pasado se produjeron cuatro accidentes durante toda la campaña, algo que pone de manifiesto que se están haciendo las cosas bien, con el riesgo añadido que supone tener que transportar muchas toneladas de tomate en menos de dos meses», resaltó el responsable de UPA-UCE. 

Sin embargo, las organizaciones agrarias denuncian el estado de algunos caminos, que califican de lamentable, y que deterioran las ruedas de los vehículos, multiplican los riesgos y las sanciones para los transportistas. Ya exigieron a la Junta de Extremadura la reparación de esas vías, aunque se lo trasladaron al delegado del Gobierno, quien acentuó que se trata de una competencia del Gobierno regional y de los ayuntamientos no del Estado, pero «se trasladará a la Junta de Extremadura y a ayuntamientos una vez se conozcan las prioridades».

Por último, Ignacio Huertas quiso «pedimos disculpas de antemano al conjunto de la ciudadanía porque hay que trasladar más de 2.200.000 toneladas en poco tiempo, pero se trata de un sector fundamental para la riqueza y empleo extremeño, así que se harán los trabajos con las mayores condiciones de seguridad posible sabiendo que el riesgo cero no existe».