La región estrena el verano con 1.920 parados menos y 5.104 empleos más

Junio es la puerta de entrada al verano, una estación que este año se prevé que va a ser de récord en términos turísticos. Un buen comportamiento que también parecen estar esperando las empresas a tenor de los datos de empleo y contratación del mes pasado que se han dado a conocer este martes. En el caso extremeño, el paro registrado en las oficinas de los servicios públicos de empleo disminuyó en 1.920 personas con relación al mes anterior (-2,6%) hasta los 71.834 desempleados, según datos publicados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, en lo que es la quinta bajada mensual consecutiva. En el último año, el desempleo acumula un descenso de 5.414 parados, lo que supone un 7,01% menos. Asimismo, la Seguridad Social ganó 5.104 afiliados medios en junio en Extremadura en comparación al mes anterior (+1,23%), hasta los 419.031. Respecto a junio de 2023, se aumentó en 3.688 inscritos (+0,89). 

En el conjunto del país, el paro registrado cayó en todas las comunidades autónomas, lo que se tradujo en 46.783 personas menos a la búsqueda de una ocupación laboral en España. En cuanto a la afiliación, se contabilizaron 71.095 nuevos inscritos en la Seguridad Social cerrando el mes al borde de los 21,4 millones, un nuevo máximo histórico. En comparativa intermensual, como es tradicional en este mes el sector que más aumentó su afiliación en el Régimen General fue la hostelería, con 32.030 afiliados más (un 2,01%), por encima del comercio (30.304, +1.17%). Entre ambos compensaron la pérdida en el sector educativo (-51.645), otro comportamiento habitual en estas fechas que anteceden al periodo estival.

En Extremadura, por sectores, el paro bajó en el de los servicios, 1.701 menos (-3,05%); agricultura, 134 menos (-2,41%); industria, 130 menos (-3,18%); y construcción, 120 menos (-2,17%), mientras que se ha incrementado en sin empleo anterior, con 165 más (+3,51%). A fin de  del mes, los sectores con más parados son servicios (52.379), construcción (5.301), y agricultura (5.285), seguidos de sin empleo anterior (5.035) y de Industria (3.834).

En cuanto a sexos, de los 71.834 desempleados registrados en junio en Extremadura, 46.226 eran, 2.533 menos (-5,19%) y 25.608, hombres, lo que supone un descenso de 2.598 en el número de desempleados respecto al mes anterior (-9,21%). En junio, el paro entre los jóvenes menores de 25 años ha bajado, con 301 parados menos que a cierre del pasado mes (-5,21%), mientras que el paro de las personas con 25 años y más se ha reducido en 4.830 desempleados (-6,79%).

El paro ha bajado en las dos provincias extremeñas en junio en comparación con el mes anterior. En concreto, ha descendido en 966 personas en la de Badajoz (-1,98%), y en 954 en la de Cáceres (-3,81%).

El empleo suma 71.000 ocupados en un junio discreto, pero ya roza los 21,4 millones de ocupados

Por su parte, en tasa interanual el desempleo ha bajado en 3.326 personas en la provincia pacense (-6,51%), y ha descendido en 2.088 personas en la provincia cacereña (-7,97%).

Por otra parte, en junio se han registrado 38.464 contratos en Extremadura, un 3,49% menos que en el mismo mes del año anterior. De todos ellos, 10.954 han sido contratos indefinidos, cifra un 7,35% inferior a la de junio del año anterior y 27.510, contratos temporales (un 1,86% menos).

Del número de contratos registrados en junio, el 71,52% han sido temporales (frente a un 70,39% del mes anterior) y un 28,48% indefinidos (el mes precedente fue un 29,61%).

Valoraciones

La secretaria general de Empleo de la Junta de Extremadura, Celia Derecho, consideró «que la puesta en marcha del decreto de Empleo Estable y reducción de costes laborales a las empresas o el decreto para el fomento y consolidación del empleo autónomo, además de la batería de medidas y apoyo a las empresas empiezan a dar resultado», mientras que el portavoz del Grupo Popular en el parlamento extremeño, José Ángel Sánchez Juliá, aseveró que «estamos ante los mejores datos de empleo de la historia de Extremadura». En parecidos términos, el portavoz de Vox en la Asamblea, Óscar Fernández Calle, afirmó que se trata de una bajada «histórica» del paro en la región y argumentó que la comunidad autónoma registró en junio el sexto mejor dato de toda España.

La portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Piedad Álvarez, criticó que la presidenta de la Junta, María Guardiola, adelantara este pasado lunes los datos del desempleo publicados un día después, lo que a su juicio supone una «falta de respeto institucional que siempre se ha guardado en la transmisión» de esta información. Igualmente, resaltó que el PSOE «se alegra mucho del descenso del desempleo en Extremadura», aunque ironizó con que si «todos los males de Extremadura son consecuencia de los 36 años de gobiernos socialistas, todos los parabienes también tendrán algo que ver con su gestión».

En opinión de la portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, «aunque para nosotros la bajada del desempleo es siempre positiva», en el PP no deberían ser «triunfalistas», «ya que deberían ser coherentes y seguir afirmando que los datos de desempleo están manipulados porque no se están contabilizando los fijos discontinuos».

Patronal y sindicatos

Entre los agentes sociales, el secretario general de la Creex, Javier Peinado, coincidió en una lectura positiva de las cifras, pero insistió en la necesidad de abordar la «paradoja» que supone que haya más de 71.000 personas teóricamente buscando empleo y a la vez que existan 6.000 vacantes sin cubrir en las empresas «y no de puestos muy especializados, sino en todas las escalas, incluso las más básicas».

El sindicato UGT Extremadura defendió que las estadísticas «muestran una evolución positiva del mercado laboral extremeño, en línea con los resultados que tradicionalmente se obtienen para este mes», en el que «el empleo crece y el paro cae», por lo que llamó a no caer en la complacencia.

El sindicato CCOO de Extremadura achacó la creación de empleo a las medidas concertadas con los agentes sociales y reclamó al Gobierno central valentía para reducir la jornada de trabajo y así «seguir consolidando los buenos datos de empleo». Esgrimió que a pesar de que «buena parte del empresariado lanza mensajes de miedo y catastrofistas sobre sus consecuencias», está «plenamente constatado que actuaciones progresistas similares, como el aumento del salario mínimo interprofesional o la reforma laboral, no solo no fueron perjudiciales como advertían, sino que han sido elementos clave para crear empleo y mejorar el mercado de trabajo».