Vox insiste: "El regadío de Tierra de Barros definirá la legislatura"

"Nada hubiera sido ni será posible sin Vox". El presidente del Grupo Parlamentario Vox, Ángel Pelayo Gordillo, ha centrado su primera intervención en el Debate sobre el Estado de la Región en analizar el cumplimiento del pacto de gobierno con el PP en Extremadura. Tras avisar a la presidenta de la Junta, María Guardiola, de que su apoyo no es "incondicional", ha insistido en el regadío de Tierra de Barros: "definirá la legislatura", ha dicho Gordillo después de que en su discurso de este lunes Guardiola ni siquiera mencionara este proyecto.

"Nada de lo conseguido, que es mucho, ni nada de lo que aún haremos, que será más, hubiera sido ni será posible sin Vox", ha advertido Pelayo al PP. En cuanto al regadío de Tierra de Barros, al que ha calificado como "el mayor engaño" de los socialistas, ha considerado que es momento de mirar hacia adelante, porque los regantes lo merecen.

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"Su puesta en marcha definirá esta legislatura. Desde Vox hemos adquirido el compromiso de llevarlo a cabo. Cada uno establece sus prioridades y vamos a cumplir", ha reafirmado Gordillo, que insiste en que aún sin el apoyo de Pedro Sánchez y la Unión Europea el proyecto debe llevarse a cabo. "No es el escenario que nos hubiese gustado encontrarnos, pero es el que tenemos. Nosotros nos hemos comprometido como Gobierno con este proyecto y hay que llevar este compromiso hasta sus últimas consecuencias, haciéndolo efectivo en los próximos presupuestos", ha reiterado.

Respeto institucional

Gordillo ha defendido que la gran aportación de Vox al cambio en Extremadura es contribuir a "la estabilidad política que todo proyecto serio requiere" y como prueba de la "confianza mutua" entre los dos partidos que sustentan el gobierno ha mencionado el apoyo a las cuentas autonómicas de 2024. De este modo, espera del PP "lealtad y fidelidad" al compromiso adquirido con el pacto de gobierno, el cumplimiento de sus puntos en su totalidad y el "respeto institucional que Vox merece".

Todo ello con el propósito de llevar a cabo "el rearme económico, social y moral" de Extremadura después de 36 años de régimen socialista empobrecedor. Un proyecto "agotado y caduco" que está "en retroceso" como se ha visto en las elecciones europeas y que ha colocado a Extremadura a la cola de todos los indicadores.

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Con respecto a la política fiscal, Gordillo ha criticado que los socialistas hayan sometido a la región al régimen impositivo "más implacable" de entre todas las regiones y tras valorar las medidas tomadas en este primer año, avisa que aún queda mucho por hacer en virtud de ese pacto de gobierno: bajada del impuesto de transmisiones patrimoniales y matriculaciones, nuevos sujetos exentos de sucesiones, seguir reduciendo el IRPF, revisión de tasas y precios públicos y nuevas deducciones para familias por material escolar o uniformes son algunas de las plasmadas en ese documento.