Womad Cáceres prohibirá el botellón en la plaza: "Hemos venido a ser valientes y a que se hable solo de música"

Womad abre este año una nueva etapa en Cáceres. De forma literal, porque estrena dirección. La madrileña Sonde3, que organizan los festivales Río Babel y San San, toma el relevo de Dania Dévora, que ha estado al frente del festival desde que llegó en los 90. Y de forma figurada, porque la organización se ha mostrado contundente con el botellón en la plaza que parece zanjar una brecha que se ha ido cronificando en los últimos años y que ha acompañado al festival al margen de lo musical. 

Desde hace años, la entrada con alcohol en el recinto de los conciertos ha protagonizado numerosos debates, pero hasta la fecha aunque los distintos gobiernos se han mostrado contrarios, han eludido tomar medidas salvo recomendaciones. Lo cierto es que el botellón está prohibido, pero la estampa más generalizada durante décadas ha sido la de una plaza Mayor atestada de asistentes con bolsas y botellas que concluía con quejas por la suciedad y por las aglomeraciones.

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Así, coincidiendo con la presentación este viernes del cartel de la edición que se celebra dentro de tres semanas, del 8 al 12 de mayo, Mateos hizo público que «no se permitirá entrar en la plaza con bebidas alcohólicas». «Hemos venido a ser valientes y a que se hable solo de música y no de si se puede beber o no». El alcalde Rafael Mateos defendió la decisión por razones de seguridad en caso de evacuación, el año pasado tuvo que cerrarse la plaza porque estaba saturada, y por respeto a los artistas que se suben al escenario. «Es un paso importante para recuperar la esencia de Womad», concluyó. 

Sí se permitirá entrar con botellas de agua sin tapón, y se podrá consumir en los bares de la plaza y en la barra instalada por la organización, emulando la dinámica de los conciertos de los 40 de los últimos meses. Esta postura provocó reacciones diversas este viernes. Hubo quienes aplaudieron la medida por su contundencia y hubo también quien criticó al ayuntamiento con el pretexto de que pretende favorecer a los hosteleros de la plaza y de que los bares puedan imponer precios elevados al ser los únicos que puedan dispensar alcohol. Lo cierto es que no se ha precisado si en las conversaciones que asegura haber mantenido el ayuntamiento con los hosteleros, se ha instado a mantener precios populares. Este formato en el que se prohibió entrar con alcohol ya se testeó hasta en dos ocasiones con los conciertos de los 40 principales. En ambos casos, la panorámica ha sido de una plaza con 12.000 asistentes. En lo logístico, también confirmó la consejera Victoria Bazaga que habrá más seguridad privada. En lo artístico, el festival repartirá 16 conciertos en tres días y recupera el tercer escenario de Santa María par alas bandas extremeñas.

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